Hace dos meses
Javier Sicilia advertía que en
La Vanguardia de Barcelona se habían publicado estas dos dobles sobre la toma de posesión de Obama. ¡De lo mejor que se ha hecho por aquí últimamente!, advertía.
Vimos las firmas y nos preguntamos, éstos del este, se están americanizando demasiado, hasta se ponen nombres de la tierra de Abraham Lincoln. Rafa Salas es un histórico, Alan Jürgens lo va a ser, pero de Harry Hausen y John Mc Phanton no teníamos noticia.
Jaime Serra, director de Infografía de La Vanguardia, nos explica el proyecto:
«Hoy podemos obtener buena información -textual y, sobre todo, visual- de casi todos los temas, sin movernos de la oficina, es lo que tiene Internet, claro que hay que fiarse de fuentes que son dudosas….
Y no solo conseguimos información visual sino directamente la imagen final.
Por ejemplo, no hace mucho tiempo hicimos un gran gráfico sobre la Terminal Sur de Barcelona.Con la información que teníamos había un dibujo en 3D. Fue cuestión de llamar a la persona de AENA que lo hizo y pedirle un ‘render’ desde el punto de vista que nos interesaba.
En el caso de la Casa Blanca, trabajamos partiendo de un modelado un poco cutre, pero fiable, que nos bajamos de internet por un precio ridículo.
El resto de información es fácil de conseguir. Pero en el caso de la toma de posesión de Obama, el tema era más peliagudo:
Era complicado conseguir información y mucho más que fuese fiable, así que pensé que merecía la pena gastarse el dinero ahorrado todo el año en colaboradores en una buena doble.
Primero pensé en contratar sólo a una ‘researcher’ (documentadota) y hacer el grafico aquí, pero la verdad es que finalmente me pareció más sencillo encargarlo todo fuera.
Me puse en contacto con Harry y John, dos infografista de primera y ellos se encargaron de todo.
Desde La Vanguardia, cuando encargo algo fuera, pido varios bocetos y finalmente nos encargamos de toda la edición final, que a veces supone cambios de estructura en el grafico. John es muy fino editando.
Como anécdota: Patricia arrojó la toalla cuando una noche se personó el FBI en su casa y la sometieron a un interrogatorio para saber por qué andaba metiendo las narices en todo este asunto.»